viernes, 4 de junio de 2010

“-Vivimos un solo día real, en el que recordamos falsas memorias de haber vivido muchos más- sentenció el Yeti
-¿Es hoy?-preguntó el despechado
-No-“

Derivando por la ciudad vieja Herzog se dio cuenta de que estaba debajo del edificio de ladrillos rojos de Natalia. Vio su reloj y los números distorsionados le dijeron que ella seguía en la cama. Recordó los días buenos. Así que sujetó a una de las bolsas que flotaban alrededor, la puso sobre su cabeza y se elevó rápidamente hasta el piso de Natalia. Sin romperla disolvió la ventana y se propulsó hacia dentro; su ropa se desvaneció en el aire y aterrizó ligeramente en la cama, al lado de Natalia, que comenzaba a estirarse, y sin dejar de elongar sus largos brazos blancos le dio un beso suave en los labios a Herzog.
-Te echaba de menos, Herzi- dijo con un aliento dulce, empalagoso ,por la mañana- es bueno que sueñes conmigo-
-Si, amor. Siempre que estoy contigo es un sueño- y se acercó a besarla, pero la total ligereza y despreocupación con la que Herzog tomó su declaración le molestó a Natalia, quien corrió la cara.
-No, Herzog. Esto si es un sueño. Piensa en como entraste-
-Volé con una bolsa- dijo casi infantilmente y con un dejo de orgullo.
-Eso no es normal-
-Pero si antes hice lo mismo en la ciudad de los gnomos-
-Eso no pasa en “el mundo real”-
-Pero este es el único mundo real que conozco-
-¿Cómo? ¿No recuerdas el estar despierto?-
-Estoy despierto ahora- Herzog comenzaba a darse cuenta de su situación- Siempre lo he estado-
-No, Herzog. Estás soñando. Cuando sueñas el tiempo se distorsiona, probablemente sólo estés durmiendo una siesta ahora. Yo soy un personaje en tu sueño- y se acercó a Herzog para besarlo de forma más profunda y terminar con la conversación, pero eso ya no era posible.
-Pues no quiero despertar-
-No es esa la idea, Herzi-
-¡Pero no!, Me niego a despertar- y golpeó la cama con su puño. Esto lo hizo despertar a otro sueño. Ahora los ojos de Natalia eran de otro color.
Herzog aceptó su condición de soñador. Y amó a Natalia hasta que el sol volvió a salir y despertó a otro sueño.

1 comentario:

Unknown dijo...

me quede en una nube